Reflexiones (quizás) más que irrelevantes.
Érase un blog que comenzó por la inevitable necesidad del autor de decir algo. Se dio cuenta de que si no colaboraba en una “comunidad” jamás tendría repercusión. Dicho blog, que era honesto consigo mismo empezó a aglutinar una comunidad alrededor, pero no una comunidad de comentadores cualquiera, juntó a grandes blogs que formaban parte de éste como él formaba parte de los demás.
Pero el mundo blog es ingrato…
A veces nuestro tiempo como bloggers no es tan grande como miembro de esa comunidad. Y, lo más importante es publicar.
La comunidad desapareció a excepción de algunos miembros fieles. Grandes bloggers que aunque con su propio mundo, nunca olvidó que antes hubo un espacio, que aunque humilde, siempre se acordaba de lo suyos. Y este aunque este blog no fuese capaz de descolgar el teléfono, nunca olvidaba y nunca dejaba pasar por alto la lectura de éstos a los que considera sus camaradas.
Lo triste es que muchos han desparecido por eso. Sin saber que en las sombras eran seguidos, decidieron abandonar.
Y pido como humilde blog, que nunca desaparezcan blogs porque se crean olvidados, aunque la rutina haga sentir a sus dueños como olvidados sin serlo.
Si veis que un blog se apaga, gritadle que no lo haga. Que estáis ahí para leerlo porque en el fondo, todos necesitamos saber que hay alguien al que le interesa lo que contamos. Si en algo no sabéis que contestar, decid solamente hola.
No permitáis que mueran blogs que no lo merecen. Hacedlos sentir, vivir, contar, transmitir… siempre, siempre, todos saldremos ganando.
Dedicado a unforgettable solitude, guia y ejemplo de honestidad blog y de cuyo autor pude leer uno de los post, en mi humilde opinión, más grandes que ha dado la blogosfera hispana.
Pero el mundo blog es ingrato…
A veces nuestro tiempo como bloggers no es tan grande como miembro de esa comunidad. Y, lo más importante es publicar.
La comunidad desapareció a excepción de algunos miembros fieles. Grandes bloggers que aunque con su propio mundo, nunca olvidó que antes hubo un espacio, que aunque humilde, siempre se acordaba de lo suyos. Y este aunque este blog no fuese capaz de descolgar el teléfono, nunca olvidaba y nunca dejaba pasar por alto la lectura de éstos a los que considera sus camaradas.
Lo triste es que muchos han desparecido por eso. Sin saber que en las sombras eran seguidos, decidieron abandonar.
Y pido como humilde blog, que nunca desaparezcan blogs porque se crean olvidados, aunque la rutina haga sentir a sus dueños como olvidados sin serlo.
Si veis que un blog se apaga, gritadle que no lo haga. Que estáis ahí para leerlo porque en el fondo, todos necesitamos saber que hay alguien al que le interesa lo que contamos. Si en algo no sabéis que contestar, decid solamente hola.
No permitáis que mueran blogs que no lo merecen. Hacedlos sentir, vivir, contar, transmitir… siempre, siempre, todos saldremos ganando.
Dedicado a unforgettable solitude, guia y ejemplo de honestidad blog y de cuyo autor pude leer uno de los post, en mi humilde opinión, más grandes que ha dado la blogosfera hispana.
3 comentarios:
A mí me pasó contigo que pensé que te habías olvidado de este espacio que creaste con tanto cariño... cuando volviste me hiciste sonreir y, hoy por hoy, sigo siendo fiel a tus letras y a tus cuatro pelos.
Hay blogs que tienen vida propia, sin duda... como este, sospecho...
besicos y gracias por la visita :)
Mond, creo que nunca llegué a dejarlo, aparcado quizás. Tenía dificultades para publicar y de algún modo deje de hacer el "esfuerzo". :·D
Belén, si un blog no tiene vida propia ¿Qué nos queda a los mundanos? :·D y, gracias a tí por la tuya.
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